lunes, 20 de septiembre de 2010

POEMA JAPONÉS/REFLEXIÓN



Es la transcripción de un poema japonés. Un maestro del té escribe a otro:


"Para darte las gracias por el poema que me enviaste, te mando unas

pocas hojas de té.

Proceden del árbol que posee el monasterio situado

en la montaña Ui.

Es el té más ilustre del imperio.

Procúrate una

vasija azul de Ni-hing.

Llénala de agua de nieve recogida, a la

aurora, en la vertiente oriental de la montaña.

Cola esa vasija sobre

un fuego de briznas de arce y déjala allí hasta que el agua empiece a

reír.

Arrójala entonces a una taza de Huen-tcha donde habrás puesto

mis pocas hojas de té.

Coloca encima un pedazo de seda blanca, y

espera que se esparza un perfume comparable al de un jardín.

Lleva la

taza a tus labios y luego cierra los ojos. Te hallarás en el paraiso.

(Anónimo)


Me gustaría recibir vuestros comentarios acerca del significado que le dáis a éste poema.


Publicado por: Carmen F.S.

Imágenes extraidas de Internet

3 comentarios:

  1. Creo que cada vez que nos regalamos un rato para nosotros, estamos disfrutando de un lujo maravilloso.

    ResponderEliminar
  2. La primera sensación que me produce este poema es la sencillez con la que podemos ser felices utilizando las cosas que tenemos a primera mano empezando con lo que nos ofrece la naturaleza. Por ejemplo hace casi una hora he disfrutado con mi hijo Darío un rato de felicidad enorme buscando almendras en el parque que tenemos al lado de casa y después de abrirlas con sumo cuidado le hemos compartido entre los dos y hemos terminado dándonos un beso.
    Raquel

    ResponderEliminar
  3. Hoy he vuelto a leer el poema y sigo pensando, y cada vez más convencida, de que un rato para nosotras es un lujo, un regalo que nos podemos ofrecer.
    Un beso

    ResponderEliminar